Me presento, soy Moni y tengo muy buena fama por mis préstamos personales para todos. Ésta es la primera y gran diferencia con los créditos tradicionales: a mí no me presentás papeles, ni recibos de sueldo; no tenés que hacer ningún trámite, está todo en la red. Desde la web -o bajando mi app en tu celular- y con solo registrarte, ya nos estaremos conociendo para empezar a hacer tratos juntos. Así me pedís plata desde donde quieras, las 24 horas, los siete días de la semana.
Como se trata de un préstamo no es obligatorio contar con un sueldo fijo y abultado, porque mis préstamos personales son para todos y de hasta $20.000 a devolver hasta en 3 cuotas. Es indispensable disponer de algún ingreso y de una cuenta bancaria, pero estos requisitos mínimos nada tienen que ver con las exigencias de las tarjetas de crédito, los bancos y otras entidades financieras. Son condiciones básicas para confirmar que podrás hacer frente al pago del préstamo. Cuanto más te conozco, más dinero te puedo dar y menos te cobro.
Otra ventaja es que no hay montos fijos establecidos. Te doy la cantidad exacta que necesitás, para que puedas devolverla hasta en 3 cuotas. El trámite es rápido y la platita se deposita en el día. Mis préstamos personales son para todos los que necesitan un adelanto. La cosa es muy transparente, no hay tasas variables, ni cargos ocultos. Cuando se confirma tu adelanto ya disponés de toda la información. ¡Con Moni no te llevás sorpresas! Sólo buenas noticias y el efectivo que te falta para hacer lo que quieras.
Los motivos para pedirme pueden ser un montón: facturas impagas, multas, gastos médicos inesperados, compras postergadas para la casa o los chicos, arreglos del auto, una mudanza, el alquiler, un viaje… Desde algún gusto o capricho, pasando por deudas o pagos atrasados, hasta ¡llegar a fin de mes! Moni te entiende. Por eso, no esperes más. Aprovechá los préstamos personales para todos los que no reúnen las condiciones tradicionales de los bancos.